Durante este verano hemos estado trabajando en el Colegio Huerta Santa Ana para adaptar un espacio del centro como aula TEA, con el objetivo de favorecer la comodidad y seguridad del alumnado, y disminuir la estimulación sensorial provocada por distracciones o molestias.

El nuevo espacio se encuentra organizado siguiendo una secuencia espacial que divide el ambiente en tres áreas:

• Trabajo "uno a uno"
• Actividades de grupo
• Juego / ocio

En cuanto a los revestimientos, la distinción de colores en el pavimento vinílico, que a su vez evita el ruido al mover el mobiliario, establece un límite claro que facilita la comprensión de la diferenciación de espacios. Además, el techo acústico aísla frente al ruido, favoreciendo la atención y concentración. Por último, las paredes han quedado lisas para permitir la incorporación de apoyos visuales.

La iluminación artificial incorporada se resuelve mediante luces LED, evitando de esta forma las distracciones que pueden causar los fluorescentes debido a su parpadeo lumínico.