El objetivo principal del proyecto es crear una nueva imagen acorde a la filosofía de cocina de Jacopo Ovoli.

La cocina de Panrallao integra la gastronomía tradicional típica española con la italiana, todo desde una perspectiva vanguardista, por lo que el interiorismo busca transmitir la frescura de lo contemporáneo y el valor de lo mediterráneo, representado a través de colores claros y neutros en el mobiliario, y de materiales artesanales como la terracota y el rattan.

El restaurante se distribuye en un único espacio diáfano, bañado por la iluminación natural que entra a través de la fachada acristalada.

Se ha diseñado un módulo de estructura metálica suspendida, funcionando como soporte para vegetación, que reduce la altura del espacio para hacerlo así más acogedor.

Otro material protagonista en el proyecto es la terracota, que se ha empleado en el revestimiento de la barra y las lámparas ubicadas sobre ella, pensados como pequeños detalles que desprenden sensaciones vinculadas con la calidad y la tradición.